XIV - Teresa Wilms Montt


XIV

Apareciste, Anuari, cuando yo con mis ojos ciegos y las manos tendidas, te buscaba.
Apareciste, y hubo en mi alma un estallido de vida; se abrieron todas mis flores interiores y cantó el ave de los días festivos.
Y ahora eres mío, como es el agua que se escurre entre los dedos, como las sombras que huyendo se agigantan con el día; eres mío con la inquietud de que siempre te voy perdiendo.
Amo tus ojos que me rinden a tus plantas con languideces de atardecer. Los amo porque atraviesan mis pupilas, como la luz los cristales, y se recrean contemplando mi alma.
He visto en ellos la clave de mi ansia secreta, la fuente de mis delirios espirituales.
Anuarí, las brasas de tu mirar me han consagrado mujer.
En la quietud de la noche, y con las manos juntas, te hago entrega de mi alma.



















// Teresa Wilms Montt, "Inquietudes Sentimentales",1917.
// Gustav Klimt, "The Kiss Wall Mural".

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